viernes, 14 de marzo de 2008

El futbol embrutece...


Yo no digo que sea malo jugar al futbol, a mí no me gusta pero para nada este estúpido deporte, pero eso es algo que no tiene la mínima importancia. Lo que me molesta es el culto exacerbado que se le rinde a esta actividad amén de la adoración cuasi mántrica, ósea y visceral de imbéciles analfabetas, cuyo mérito sólo consiste en dominar un balón con las patas. Esto no tiene otro objeto que la infame mercadotecnia continúe con el arte de crear una necesidad que no existe, es decir, que compres cosas que no necesitas. He aquí un ejemplo:

No hay comentarios: